Dentro de las metodologías ‘agile’, la gestión de proyectos con herramientas visuales suprime reuniones innecesarias
y facilita la eliminación de cuellos de botella para agilizar las tareas.
Bajo las premisas de este tipo de modelos de gestión empresarial, los equipos multidisciplinares, con autonomía
para organizarse y capacidad de ejecución, se convierten en la base de las organizaciones. Esta forma de trabajar ayuda a garantizar la entrega constante de resultados y soluciones en tiempos más cortos.